Comentario sobre El rapto
El rapto se inscribe en la serie de pinturas inspiradas en la historia temprana de Francia que cultivó Luminais a lo largo de los últimos años de su producción, la cual lo llevó a ser conocido como “pintor de los galos”. Discípulo del pintor de historia Léon Cogniet y del animalista Constant Troyon, Luminais tuvo una particular habilidad para la representación de caballos encabritados y perros de caza, aunque también desplegó –sobre todo en sus telas de la década de 1880– desnudos femeninos sensuales y contorsionados en escenas de violencia y rapto. Es el caso no solo de esta obra sino también de varias otras como
Las cautivas (Musée de l’Ancien Évêché, Évreux) o
Pirates normandes au IXème siècle (Musée Anne de Beaujeu, Moulins). En un boceto de esta última obra, conservado en el Musée de Melun-Maison de la Vicomté, la figura femenina contorsionada aparece muy cercana a la de Buenos Aires.
En ocasión de la reapertura del MNBA en diciembre de 1897, un artículo anónimo en
La Nación (presumiblemente del director, Eduardo Schiaffino) comentó las nuevas adquisiciones y en particular, respecto de este cuadro, el curioso hecho de que había una pintura subyacente que había sido parcialmente reutilizada por el artista:
“Este cuadro, o mejor dicho la misma tela, el bastidor y el marco, figuraron en el Salón del 87 en París bajo el número 1552 y el título
Sauvetage.
”La composición primitiva de
Sauvetage, se transforma casi totalmente, desaparece el cuerpo del ahogado, la playa y el fondo y permanece tan solo el torso del ‘salvador’ intacto; el mismo gesto le convierte en un raptor […] El cuerpo inerte del ahogado se metamorfosea en el de una hermosa mujer crispada, que se defiende y grita. […]
”La presencia simultánea de dos sellos del Salón de París, correspondiente el uno a 1887 y el otro a 1890, estampados sobre el bastidor de este cuadro, unida al tono idéntico del actor principal, cuya actitud, forma, gesto y movimiento son exactamente iguales, la ubicación del torso en la misma región del lienzo, son tres afirmaciones que coinciden en modo tan evidente, que no es posible dudar que nos hallamos delante de una misma pintura modificada fundamentalmente” (1).
Sauvetage (2) se vincula más bien con la pintura que Luminais dedicó a escenas de pescadores y campesinos bretones y normandos (como
La viuda o
La familia del pescador de 1865, en el Musée d’Orsay). En la reproducción del catálogo del Salón, el cuerpo del joven ahogado aparece menos feliz en su resolución que el espléndido desnudo femenino de
El rapto. Observado con reflectografía infrarroja (por luz transmitida y parcialmente reflejada) pudo verse en parte la pintura subyacente, que coincide con dicha reproducción.
Es probable que la decisión de modificar la iconografía de la tela se deba al pobre resultado en la figura del ahogado (aun cuando había sido aceptada en el Salón). Es posible también suponer que el cambio haya respondido a una razón de mercado, en tanto en los años 80 –sobre todo luego de sus dos triunfos en el Salón de París con
Les énervés de Jumièges en 1880 (Art Gallery of New South Wales, Australia) y
La huida del rey Gradlon en 1884 (Musée des Beaux-Arts de Quimper)– era ya ampliamente reconocido como pintor de historia antigua francesa, un género aún más prestigioso en los salones que el costumbrismo localista que había cultivado de preferencia hasta entonces. De hecho, Luminais figuró en la Exposición Universal de 1889, con aquellos cuadros de historia francesa con los que había triunfado en el Salón.
por Laura Malosetti Costa
1— Anónimo, “Museo Nacional de Bellas Artes. Su reapertura. Las nuevas obras adquiridas”, La Nación, Buenos Aires, 26 de diciembre de 1897, p. 5-6. 2— Exposition des Beaux-Arts. Salon de 1887. Catalogue illustré. Peinture & sculpture. Paris, Ludovic Baschet, 1887 (Sauvetage, nº 1552, reprod. p. 149); Explication des ouvrages de peinture, sculpture, architecture, gravure et lithographie des artistes vivants exposés au palais des Champs Élysées. Paris, Paul Dupont, 1887.
Bibliografía
1890. Exposition des Beaux-Arts. Salon de 1890. Catalogue illustré. Peinture & sculpture. Paris, Ludovic Baschet, reprod. p. 160.
1897. “Museo Nacional de Bellas Artes. Su reapertura. Las nuevas obras adquiridas”, La Nación, Buenos Aires, 26 de diciembre, p. 5-6.
1993. OLIVEIRA CÉZAR, Lucrecia de, Aristóbulo del Valle. Buenos Aires, Gaglianone, p. 74, 91.
2001. MALOSETTI COSTA, Laura, Los primeros modernos. Arte y sociedad en Buenos Aires a fines del siglo XIX. Buenos Aires, FCE, p. 250, fig. 39. 2002-2003. DAUM, Françoise et Dominique Dussol, Évariste Vital Luminais. Peintre des Gaules, 1821-1896. Carcassonne, Musée des Beaux-Arts, p. 101.
2004. ARTUNDO, Patricia M. (coord.), El arte francés en la Argentina 1890-1950. Buenos Aires, Fundación Espigas, p. 110-111.
2006. BALDASARRE, María Isabel, Los dueños del arte. Coleccionismo y consumo cultural en Buenos Aires. Buenos Aires, Edhasa, p. 171-172.
