Comentario sobre (Retrato de María del Carmen Reyna y Roballos de Fernández Blanco), Retrato de María Reyna de Fernández Blanco
Hacia la segunda mitad del siglo XIX, la alta burguesía argentina adquirió una serie de prácticas y estrategias para distinguirse como elite económica y cultural. La ascendencia criolla, la posesión de la tierra, los casamientos dentro del grupo para evitar la
mésalliance, la educación para los hombres y la concepción de la mujer como prolongación moral de estos dentro del ámbito doméstico se constituyeron en baluartes que sostuvieron dicha distinción. Para señalar este distingo fue necesario exhibir los éxitos y la riqueza acrecentada, consumir y coleccionar bienes suntuarios y obras de arte así como crear y patrocinar instituciones culturales (1). Isaac Fernández Blanco (2) cumplió con todos estos requisitos y, como frecuentador de los grandes salones parisinos, a la hora de hacer retratar a los miembros de su familia recurrió a los pintores académicos consagrados. Carolus-Duran fue el artista francés que mejor interpretó las necesidades de una burguesía en ascenso. Al utilizar la obra de Velázquez como fuente de inspiración, otorgaba a sus consumidores un halo de modernidad sobre el marco academicista convencional y los hacía sentir émulos naturales de la aristocracia. La María Reyna retratada por Duran es el modelo de esposa burguesa: pálida, distante, sumisa y complaciente, contenida en una tristeza lánguida (3). Así, con gesto triste, debía ser representada la esposa de un señor como Fernández Blanco, más allá de que el artista no supiera de las desavenencias matrimoniales o de la quebrantada salud de la hija primogénita que moriría en París a pocos meses de realizado este cuadro (4).
por Gustavo Tudisco
1— María Isabel Baldasarre, Los dueños del arte. Coleccionismo y consumo cultural en Buenos Aires. Buenos Aires, Edhasa, 2006, cap. 1.
2— Isaac Fernández Blanco fue el fundador del museo homónimo de Buenos Aires, creado en base a sus colecciones de arte hispanoamericano, objetos históricos e instrumentos musicales antiguos.
3— Cf. Bram Dijkstra, Idols of perversity. Fantasies of feminine evil in fin-desiècle culture. New York/Oxford, Oxford University Press, 1986, p. 23.
4— Cf. Martín Pieres, Historia de algunas familias argentinas. Buenos Aires, edición del autor, 1992, p. 240-247 y Alicia Jurado, 1989, p. 46-54.
Bibliografía
1989. JURADO, Alicia, Descubriendo el mundo. Memorias (1922-1952). Buenos Aires, Emecé, p. 48.