Comentario sobre Moisés elevando la serpiente de bronce (Números 21:5-9)
En la vida de Adriaen de Weerdt, “pintor de Bruselas”, Karel van Mander (
Schilderboeck, 1604) menciona “un excelente y virtuoso joven maestro, Hans Speckaert, que pintaba y dibujaba muy bien” a quien conoció en sus días en Roma, y agrega que desde Florencia “preparó el viaje de retorno a los Países Bajos pero debió volver inmediatamente a Roma, donde murió en 1577; original de Bruselas, era hijo de un bordador”. La información sobre el artista es escasa pero sabemos que fue influenciado por artistas flamencos como Hans von Aachen y Jan Soens, y por Rafael, Miguel Ángel, Polidoro da Caravaggio (1490/1500-1543?), Parmigianino (1503-1540), además de los boloñeses Prospero Fontana (1512-1597), Bartolomeo Passarotti (1529-1592) y Lorenzo Sabatini (ca. 1530-1576) durante su estadía en Florencia y en Roma, que ya en el siglo XVI era una meca para los artistas del norte de Europa. A partir de esta experiencia modeló su estilo, que comparte los principios manieristas imperantes no solo en Italia sino también en el norte de donde era originario.
Nuestra obra muestra esas características y se distingue por la composición que favorece un primer plano ocupado por figuras desnudas y un segundo plano distante donde aparece su motivo temático principal. Las figuras aparecen organizadas como en un friso que solo quiebran dos personajes que se ven a la izquierda; sorprenden por sus cuerpos musculosos, con cabezas pequeñas y miembros alargados, que se contorsionan en poses rebuscadas motivadas por la necesidad de librarse de las serpientes que caen del cielo. Los movimientos y gestos exagerados se expresan en vistosos y virtuosos escorzos que se distribuyen en una composición espacial caracterizada por el gran vacío que se ha creado entre el primer y segundo plano donde aparecen empequeñecidos Moisés junto a la serpiente de bronce y otros personajes atacados por las serpientes. Estas características, a las que se suma un delicado uso del color, conforman un producto típico del manierismo romano de la segunda mitad del siglo XVI. En las figuras se puede ver de inmediato la influencia del
Laocoonte, grupo escultórico que se convirtió en un punto de referencia para muchos artistas. Sylvie Béguin, que estudió la obra y propuso la atribución a Speckaert (1) ha señalado cómo “la figura extendida del centro, con su rostro vuelto hacia atrás, recuerda al hijo más joven de Laocoonte, así como la figura femenina del extremo derecho (pero esta vez visto de espaldas…). La segunda figura masculina de la izquierda fue, sin duda, inspirada por el mismo Laocoonte. Para Speckaert no se trata jamás de una copia textual sino de recuerdos, usados con gran fuerza de expresión y una viva preocupación por la ordenación decorativa de ritmos”. Pero también puede detectarse la influencia de Miguel Ángel a partir de las figuras de su
Batalla de Cascina y sobre todo de la pechina que con el mismo tema había pintado en la Capilla Sixtina.
La atribución de Béguin fue realizada en base a una serie de dibujos identificados con el artista que halló en el Kunstmuseum de Düsseldorf, especialmente uno (2) que se vincula claramente con esta composición. Legada por José Pérez Mendoza, la obra ingresó en 1937 como anónima y con el extraño título de
El castigo de la desnudez. En relación al tema no queda ninguna duda de que se trata del episodio de la serpiente de bronce (Números 21, 5-9) que se ve en el segundo plano. Béguin asimismo ubica la obra alrededor de 1575. Debemos decir que en 1995 Jacques Foucart se manifestó en contra de esta atribución pero, por lo que sabemos, no produjo ninguna diferente hasta el momento.
por Ángel M. Navarro
1— Alegret, que había atribuido la obra a un artista del círculo de los Zuccari, publicó la nueva atribución de Béguin (Alegret, 1980).
2— Pluma y aguada marrón con realces de blanco, sobre papel verde, 22 x 42,8 cm, cat. 1930 (por Illa Bude), nº 790, il. 152.
Bibliografía
1973. BÉGUIN, Sylvie, “Pour Speckaert” en: Album Amicorum J. G. van Gelder. The Hague, Nijhoff, p. 9-13, fig. 12.
1980. ALEGRET, Celia, “Un cuadro de Hans Speckaert”, Horizontes, Buenos Aires, vol. 3, nº 7, mayo-junio, p. 4-7, fig. 1.
1985. BOSQUE, Andrée de, Mythologie et Maniérisme. Paris, A. Michel, p. 62. 1990. DACOS, Nicole, “Un élève de Peeter de Kempereer, Hans Speckaert”, Prospettiva, Firenze, vol. 57-60, p. 87.
1994. NAVARRO, Ángel M., La pintura holandesa y flamenca (siglos XVI al XVIII) en el Museo Nacional de Bellas Artes de Buenos Aires. Buenos Aires, Asociación Amigos del MNBA, p. 81-84, reprod. color p. 83.
1995. FOUCART, Jacques, Fiamminghi a Roma, 1508-1608, cat. exp. Bruxelles, Snoeck-Ducaju & Zoon, p. 261, 265 y 267- 269, reprod. color p. 268 (como seguidor de Hans Speckaert?).
2001. NAVARRO, Ángel M., Maestros flamencos y holandeses (siglos XVI al XVIII) en el Museo Nacional de Bellas Artes de Buenos Aires. Buenos Aires, Asociación Amigos del MNBA, p. 82-84, reprod. color p. 82. — NAVARRO, Ángel M., Flemish and Dutch Masters (from the XVIth to the XVIIIth century) at the National Museum of Fine Arts. Buenos Aires, Asociación Amigos del MNBA, p. 82-84, reprod. color p. 82.